Cuando Melissa comenzó su recuperación, encontró la comunidad y el apoyo que había estado buscando a través de su relación con Dios.
Melissa creció en un hogar amoroso. Su madre trabajaba duro para darle a la familia una buena vida, pero Melissa aún enfrentó algunas dificultades en su infancia. Desarrolló un trastorno por consumo de sustancias (TCS) porque quería encajar y sentir conexión.
Cuando Melissa comenzó a buscar su recuperación, encontró la comunidad y el apoyo que había estado buscando a través de su relación con Dios. "Sé a quién le pertenezco," dice Melissa, "y sé que Él me ha traído de un lugar tan oscuro." A través de su fe, Melissa encontró la fuerza y la sanación que necesitaba.